jueves, 13 de enero de 2011

El viaje del elefante. José Saramago

"...Vengo a hacerte una petición, pero antes quiero que me digas si tu elefante es de los enseñados, Enseñado, lo que se llama enseñado, en el sentido de saber unas cuantas habilidades de circo, no es, pero suele comportarse con la dignidad de un elefante que se respeta, Serás capaz de hacer que se arrodille, aunque sea sólo con una pata, Sepa vuestra paternidad que nunca lo he experimentado, pero he observado que solimán se arrodilla motu proprio cuando quiere acostarse, ahora de lo que no puedo estar seguro es de que lo haga si yo se lo mando, Puedes experimentar, Sepa vuestra paternidad que la ocasión no es la mejor, por la mañana solimán está casi siempre de mal humor, Puedo volver más tarde, si te parece conveniente, lo que aquí me trae no es sangría desatada, aunque mucho convendría a los intereses de la basílica que aconteciese hoy, antes de que su alteza el archiduque de austria parta hacia el norte, Aconteciese hoy, qué, si no soy demasiado osado preguntando, El milagro, dijo el padre juntando las manos, Qué milagro, preguntó el cornaca al mismo tiempo que sentía la cabeza dándole vueltas, Si el elefante fuera a arrodillarse ante la puerta de la basílica, no te parece que sería un milagro, uno de los grandes milagros de nuestra época, preguntó el sacerdote volviendo a unir las manos,..."

Me llamo Rojo. Orhan Pamuk

La sombra del ciprés es alargada. Miguel Delibes

La colmena. Camilo José Cela

lunes, 13 de septiembre de 2010

La caverna. José Saramago

"Afortunadamente existen los libros. Podemos tenerlos olvidados en una estantería o en un baúl, dejarlos entregados al polvo o a las polillas, abandonarlos en la oscuridad de los sótanos, podemos no pasarles la vista por encima ni tocarlos durante años y años, pero a ellos no les importa, esperan tranquilamente, cerrados sobre sí mismos para que nada de lo que tienen dentro se pierda, el momento que siempre llega, ese día en el que nos preguntamos, Dónde estará aquel libro que enseñaba a cocer los barros, y el libro, finalmente convocado, aparece,..."

viernes, 3 de septiembre de 2010

Conversación en La Catedral. Mario Vargas Llosa

"DESDE la puerta de «La Crónica» Santiago mira la avenida Tacna, sin amor: automóviles, edificios desiguales y descoloridos, esqueletos de avisos luminosos flotando en la neblina, el mediodía gris. ¿En qué momento se había jodido el Perú? Los canillitas merodean entre los vehículos detenidos por el semáforo de Wilson voceando los diarios de la tarde y él echa a andar, despacio, hacia la Colmena. Las manos en los bolsillos, cabizbajo, va escoltado por transeúntes que avanzan, también, hacia la Plaza San Martín. Él era como el Perú, Zavalita, se había jodido en algún momento. Piensa: ¿en cuál?"

martes, 31 de agosto de 2010

El Garden Party y otros cuentos. Katherine Mansfield

"A mí continúa pareciéndome igualmente imbécil e infernal tener que volver a la oficina el lunes -explicó-. Siempre me lo ha parecido y no creo que jamás llegue a cambiar de opinión. ¡Echar a perder los mejores años de nuestra vida sentados en un taburete desde las nueve hasta las cinco haciendo cuentas en los libros de caja de cualquier empresa! Me parece un modo sorprendente de pasar la..., la vida, la única que tenemos, ¿no crees? ¿O te parece que estoy soñando?"